Lo que era un secreto a voces al final se hizo realidad y el "Cóndor" dejará las dos ruedas para comenzar a coleccionar trofeos ahora en un monstruo patón
De Gavardo en cuatro: "Aunque ya no sea en moto, mi objetivo siempre va a estar en el Dakar"
Tras 12 años rallyando, donde fue 3 veces capo del mundo, en agosto debutará en camioneta. Una Chevrolet DMax es su nuevo juguete
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(Foto: Copesa)
Pocos supieron que hace unos meses Carlo de Gavardo partió piolita a Europa. Y los que lo cacharon juraban que su pique era para ver si la última moto con que KTM se iba a rajar venía con TAG para no andar a la maleta en la carretera como un negro califa que usa boina.
Na que ver. A lo que iba el gran "Cóndor" era a hacer realidad lo que era un secreto a voces: Acabar a la buena con sus gloriosos 12 años motoqueando para abrir otro capítulo en su vida chupatuercas, ahora detrás del manubrio de una monstruosa 4X4.
A lo crack
Usted se preguntará cómo un gallo que tiene el poto con callos fue capaz de bajarse de la moto. Simple. "En los últimos tres años le había perdido el miedo al miedo", o sea, cualquier día no iba a tener la cueva de Eliseo Salazar y podía terminar con Don Jechu como copiloto en las dunas del Paraíso.
¿Mamón, entonces? Noo. "La pasión siempre está, pero ya no tenía la motivación", agregó al toque para decir que, humildemente, ya lo había ganado todo. Tres veces campeón del mundo de rally (700 y 450 cc). No está mal para ser chileno.
Por eso que la vuelta de página fue a lo crack y en KTM además de rogarle que no fuera a meter el casco al guáter, acabaron dándole las gracias. "Y fue raro, porque en Austria me topé con el dueño de la empresa, un gallo que con raja uno ve dos veces en la vida, y cuando le agradecí me contestó 'yo tengo que dártelas a ti por los 7 años que arriesgaste la cabeza por mí", evocó.
A romperla
No hubo tiempo para las lágrimas en todo caso. Fiel a su locura, De Gavardo al toque se chifló con su nueva meta que es romperla en la Chevrolet DMax. Un monstruo de 3.000 centímetros cúbicos con el que va a debutar en agosto próximo en el Rally Dos Sertoes, el mismo donde antes fue papá en moto.
"Hay un cabro chico que está desesperado por empezar", admitió a las puertas de una aventura que sí o sí terminará en la madre de todas las carreras: El brígido Dakar. "Aunque ya no sea en moto, mi objetivo siempre va a estar allá", admitió con los mismos ojos de chifli de siempre.
Y como el huelquenino es caliente, pero por las tuercas, no se aguanta la sed de más temprano que tarde aserruchar en África, donde se tiene fe. Si el franchute Stephane Peterhansel dejó las motos y en 5 años ganó el rally de los rallies en camioneta, ¿por qué Carlo no la podría hacer, ah, ah? Total, por mucho que cierren las inscripciones para el próximo Dakar ahora luego, si se le arrancan las cabras igual va. "Mi papá es más conocido que yo y se le cambia unas botellas de pisco por unas de vodka a los rusos, todo se puede hacer". Más claro echarle agua, ¿no?.
"Luksic está más loco que yo"
En su nueva aventura a Carloco le prestarán ropa y money sus fieles escuderos de siempre. Onda Chevrolet, 3M, Repsol Ypf, BFGoodrich, A Acerbis, nuestra alma mater Copesa y el Banco de Chile.
A todos los jefecitos les pegó su chuplicada para que no se mueran nunca, pero donde más saliva gastó fue en Andrónico Luksic, un gallo que no hace fila para depositar pues es el amo del Banco de Chile.
"El patrón (Luksic) está más loco que yo para andar arriba de ese cerro. Cuántos le dijeron que cómo lo iba a hacer, pero el weón igual lo hizo", le dedicó unas sentidas palabras.
Fuente "la cuarta , la unica"